La mejor forma de combatir la deforestación e inundaciones en México es la siembra aérea, aseguró Carlos Gómez Roel, presidente de la fundación mexicana Vuelo Verde.

“Es una técnica demostrada y probada desde hace más de 70 años, avalada por la FAO y recomendada por paneles multidisciplinarios del más alto nivel científico”, explicó durante la presentación de su proyecto en el 6º Foro Desarrollo Sustentable: Acciones Concretas para el Cambio Climático.

La Brigada Aérea de Seguridad Ambiental y el Centro Nacional de Germoplasma son una de las 100 propuestas que presentaron varias organizaciones de la sociedad civil, y consiste en la creación de una flota de entre 8 y 10 aviones para bombardear de semillas los sitios que necesitan reforestación.

Las aeronaves serían tripuladas por miembros de la Fuerza Aérea Mexicana en vez de pilotos privados, y además realizarían labores de lucha contra incendios, estimulación pluvial, control fitosanitario e incluso de transporte de emergencia durante desastres naturales.

En 2007, esta iniciativa recibió el aval del Programa de las Naciones Unidas para el Medio Ambiente (PNUMA). El Presidente de la Fundación Vuelo Verde detalló que, en caso de que fuese aceptado por el Gobierno Mexicano, implicaría la participación de 14 dependencias federales, además de las 32 entidades del país.

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